Por fin ha llegado el frío y la nieve a España y aunque los amantes de los deportes de invierno estarán encantados de la vida con las primeras nevadas, las cumbres españolas son mucho más que hielo y nieve. De hecho la mayoría de ellas bien merecen una visita, independientemente de la época del año, y para muestra un botón. Mira, mira.

Teide (Tenerife)

El pico más alto de toda España se encuentra en pleno archipiélago canario. Y sin duda alguna, la silueta del Teide con sus 3.718 metros de altitud es uno de los símbolos más reconocibles de todo Tenerife. Así que, no importa si te acercas a visitarlo en verano o en invierno, porque se aseguramos que la belleza natural de este volcán patrio te dejará sin palabras.

Foto de andre.douque (CC BY-ND 2.0)

Mulhacen (Granada)

Las bellas cumbres del Mulhacen, en plena Sierra Nevada granadina, además de ser las más altas de toda la península ibérica han servido de inspiración a más de un poeta andalusí. Por otra parte, cuenta la leyenda que este monte atesora en una recóndita cueva tres diamantes negros escondidos por el rey Al Hamar. ¿Te atreves a encontrarlos?

Foto de @jesusdehesa (CC BY-ND 2.0)

Aneto (Huesca)

Sus 3.404 metros de altura, realmente  impresionan, sobre todo por el afilado perfil de sus riscos. Es el monte más alto de los Pirineos y la comarca oscense de Ribagorza puede estar orgullosa de la perfecta pirámide del Aneto y sus cuatro glaciares.

Foto de oargi (CC BY-SA 2.0)

Peñalara (Madrid y Segovia)

Pero no solo la cornisa cantábrica tiene cumbres de impresión. En pleno Sistema Central, entre Madrid y Segovia, se levanta Peñalara, declarada Parque Nacional desde el año 1990. Un paraje ideal para practicar deportes como la escalada, el senderismo y el esquí de fondo, pero también pera disfrutar de la naturaleza y observar aves como el buitre negro o el águila real.

Foto de Cesargp (CC BY-SA 2.0)

Almanzor (Ávila)

El monte Almanzor tiene una altura de 2.592 metros pero solo su pico mide 1.500 metros de altura. Está considerado un pico «ultra prominente» por lo que su escalada solo se recomienda a alpinistas experimentados. Las vistas desde su cumbre son abrumadoras y además es probable que en la ascensión te encuentres con alguna cabra montesa, águilas imperiales y gavilanes. ¡Ah, y no te dejes a atrás su circo glacial! Realmente espectacular.

Foto de Samu73 (CC BY 2.0)