Hace unas semanas os presentamos una estupenda selección de las mejores playas y calas para darse un chapuzón en Menorca. Pero si queréis seguir conociendo más rincones espectaculares donde mitigar las altas temperaturas de este verano, a continuación os mostramos otros tantos lugares de ensueño donde daros un baño inolvidable en este edén del Mediterráneo.

Cala Macarella

Macarella es una de las playas más populares de Menorca y es que gracias a sus aguas azules y tranquilas tiene una fama más que merecida. Para llegar a su orilla desde el municipio de Ciudadela basta con tomar la ronda sur con salida a Mahón. Y aunque el camino es un poco estrecho, recorrerlo merecerá la pena. Además para disfrutar de este recóndito paraíso a tope, hay a disposición de los visitantes dos parkings, un puesto de socorrista y un chiringuito donde refrescar nuestras gargantas al son de la mejor música.

Foto de rosergoula (CC BY 2.0)

Cala Pregonda

Esta cala de postal es una de las más visitadas por los propios menorquinos y con razón. Y es que el tono rojizo de su arena y la limpieza de sus aguas, unido a la escasa masificación que la rodea hace que esta cala sea única en su género. Aquí la paz y la tranquilidad están más que aseguradas debido a su aislada ubicación. Pero si queréis conocerla solo tendréis que ir a los municipios de Fornells o Mercadal y desde el parking caminar unos treinta minutos hasta llegar a este paraíso de sol y mar. ¡Os encantará!

Foto de hugos007 (CC BY 2.0)

Cala Mitjana

¿Buscáis una cala virgen de verdad? Entonces tendréis que dirigiros hasta Cala Mitjana en el sur de la isla. Para llegar a este rincón mágico de aguas cristalinas y paisajes de ensueño solo tendréis que llegar a Ciudadela y desde allí tomar la carretera dirección a Mahón y desviaros hacia Santa Galdana, antes de llegar a Ferrerías. No os preocupéis el camino está muy bien indicado y cuándo lleguéis podréis hacer unas fotografías espectaculares. Baleares 100%.

Foto de Tuscasasrurales (CC BY-ND 2.0)

Es Talaier

Esta cala es pequeña, íntima y si te despistas la puedes saltar por alto. No lo hagas, sería un grave error, porque esta diminuta y recóndita cala es tan bella que deja perplejo a todo aquel que la encuentra. Para bañarte Es Talaier primero hay que llegar hasta Son Saura y llegar a través de un caminito hasta el arenal de la cala. Son solo 15 minutos andando a cambio de disfrutar de un día de playa sin aglomeraciones ni masificaciones turísticas.

Foto de Boladevidre (CC BY-SA 2.0)