Hoy comenzamos una pequeña serie de artículos que tienen como motivo la turbadora y mística naturaleza sudafricana. En esta ocasión trataremos de difundir uno de los lugares menos conocidos en el ámbito hispánico –ni siquiera tiene una entrada en la Wikipedia española–: la Reserva Natural del Cañón del Río Blyde, que está ubicada en la provincia de Mpumalanga –que hace frontera con Mozambique y Suazilandia. El cañón del río Blyde se extiende a lo largo de 26 km y es el segundo más grande de África, tras el cañón del río Pez –Fish River Canyon–, en Namibia. En la lista mundial ocupa el tercer puesto –el primero es el Gran Cañón del Colorado. Se trata de un terreno muy abrupto cincelado a capricho por el curso del Blyde a lo largo de los siglos de forma que han surgido muchas formaciones geológicas curiosas que se han convertido en los principales atractivos turísticos del parque. La superficie de la reserva natural asciende a 29.000 hectáreas y su mayor elevación es Mariepskop, con casi 2.000 metros de altitud. A diferencia de otros grandes cañones, el del río Blyde tiene una gran cantidad de vegetación a causa del benévolo clima subtropical de la región.
Ubicación del cañón del río Blyde. Haga clic en la imagen para ampliarla.
El acceso al cañón del río Blyde se realiza por la carretera R532 desde la pequeña población de Graskop, que se encuentra a casi 400 kilómetros de Johannesburgo, la metrópoli con aeropuerto internacional más próxima al destino. Una de las visitas más recurrentes en esta reserva natural es el accidente geográfico que se conoce como la Ventana de Dios –God’s Window. Se trata de un mirador natural que permite apreciar en profundidad los valles cercanos y las estribaciones del río Blyde, que se engloban en el enorme escarpe de la cordillera del Drakensberg hasta el océano Índico.
God's Window. Foto de Wikimedia Commons.
Vista general del cañón. Foto de Wikimedia Commons.
Otros puntos de interés en esta reserva natural son las tres Rondavels –Three Rondavels, que en la imaginería aborigen representan a un jefe con sus tres mujeres–, que consisten en distintas elevaciones torneadas y de forma cilíndrica. Estas formaciones son paradigma del tipo de talla geológica que más abunda en la reserva, tallada por la presencia del agua. Además de las Rondavels, otra de las formaciones más curiosas es el Pináculo de Piedra –Pinnacle Rock–, una gran roca de decenas de metros de altura cortada a pico y con forma cuadrangular que surge bruscamente del boscoso terreno.
El «jefe y sus mujeres». Foto de Wikimedia Commons.
Pináculo de piedra de la reserva. Foto de kiel69 - Flickr
Además de los lugares descritos existen diversas cataratas a lo largo del curso del río. Las más interesantes son las cataratas Mac Mac, las cataratas Lisboa y las cataratas Berlín. Especialmente curiosas, las cataratas de Kadishi Tufa llaman la atención del visitante porque caen sobre una piedra con forma de calavera que tiene unas oquedades que semejan las cuencas de los ojos, un saliente que se parece al hueso nasal y otra oquedad inferior que recuerda la boca de El grito, del pintor Edvard Munch. También existe una red de senderos que permite explorar parte de la reserva natural y descubrir algunos de los lugares descritos. Así, practicar senderismo en esta reserva es realmente un privilegio.
Las cataratas Mac Mac. Foto de Wikimedia Commons.
Catarata de Kadishi. Fotografía de Paul Tosia - Flickr
Puente de acceso a las marmitas. Foto de Wikimedia Commons.
Kettles del Blyde. Foto de Wikimedia Commons.
Para concluir la descripción de la increíble Reserva Natural del Cañón del Río Blyde dejaremos constancia de uno de sus rincones más curiosos: el Bourke’s Luck Potholes –Marmitas de Gigante de Bourke’s Luck. Estas marmitas o kettles se encuentran en la confluencia del río Treur y el comienzo del Blyde, en un punto en que las terribles corrientes de agua han moldeado las rocas a su voluntad otorgándoles tan extrañas formas. Nota aparte: aunque los puntos de interés que más destacan son los aquí descritos, también son los más frecuentados: por tanto, caminar junto al lecho del río o surcar sus aguas en canoa solitariamente serán las actividades que mejor permitirán sumergirse al viajero en la mística y sobrecogedora naturaleza del cañón del río Blyde.
Muchos de estos puntos de interés están unidos por la Ruta Panorama, que se se considera la mejor opción para emprender el recorrido de la reserva natural. Añadimos que el cañón del río Blyde se encuentra cerca del Parque Nacional Kruger, que hace frontera con Mozambique y que se ha convertido en el más famoso y frecuentado de Sudáfrica.
En una villa como esta se aloja Cameron. Foto: http://xurl.es/9uxid
En un precioso pueblo de la Toscana italiana, el primer ministro británico y su mujer, de vacaciones, se detuvieron a tomar un café. El pueblo, corazón de la comarca de Valdarno, se llama Montevarchi y lo habían elegido por su belleza y por su numeroso patrimonio histórico y cultural. Allí los extremos de la escala social chocaron de forma un tanto brusca y, mirada la cosa con distancia, hasta cómica. Todo fue por un café. Lo cómico viene de que la camarera Francesca Ariani no sabía que delante tenía a David Cameron y a su esposa Samantha, y se negó a servirles un café a causa de lo atareada que andaba en ese preciso instante. La prensa transmitió el desliz de manera grave y trágica, pues parecía que la camarera había firmado, sin saberlo, una especie de salvoconducto al infierno, porque ni corta ni perezosa le había negado el café al matrimonio Cameron. El diario El Mundo narró así el sainete: «El premier pidió dos capuchinos y otro café en la cafetería Dolcenero en la ciudad de Montevarchi. Previamente, había pedido a una camarera que les trajera a su esposa, a un ayudante de Downing St. y a él mismo un café a la terraza donde estaban sentados. La camarera, sin embargo, le dijo que estaba demasiado ocupada.» El desenlace no tenía más salida que la represalia, así que doña Francesca se quedó sin propina: «Cameron pagó 3,10 euros con un billete de 50 euros y no dejó nada al servicio. ‘Yo estaba un poco sorprendida por eso, porque me dijeron que era muy rico’, comenta Ariani».
Panorámica de Montevarchi. Foto de Wikimedia Commons (WiCo).
Los siglos se notan en los rincones de Montevarchi. Foto de WiCo.
Claro que, si se conoce Montevarchi –que se encuentra a unos 60 km por carretera de Monteriggioni–, esta historia produce la sensación de encontrar una manzana podrida en un cesto lleno de sabrosas manzanas. La región y el casco antiguo del pueblo bien merecen correr el riesgo de enfrentarse a una iracunda camarera a la que se le amontona el trabajo de golpe. Los Cameron se alojaron en una villa del siglo XVIII que se conoce como villa Petrolio, en una región que uno de los alcaldes de la zona describió como «la parte más salvaje de la región de Chianti, hay menos cultivo y dos terceras partes están cubiertas por bosques». Y la villa Petrolio es una pequeña muestra del encanto que esconde esta región regada por el río Arno, ese que también baña a las ciudades de Pisa y Florencia y que da nombre a Valdarno.
Fachada de la colegiata de San Lorenzo. Foto de Wikimedia Commons.
El interior de la colegiata es de estilo barroco. Foto de WiCo.
La iglesia de Giglio combina belleza y sobriedad. Foto de WiCo.
La curiosa iglesia de la Ginestra. Foto de Wikimedia Commons.
Todos los pueblos de la Toscana tienen interesantes conjuntos arquitectónicos religiosos. Montevarchi es, además, uno de los mejores exponentes de la arquitectura religiosa toscana. Los templos cristianos que merecen destacarse son la colegiata de San Lorenzo, que se inauguró en estilo románico y que actualmente presenta un estilo barroco. La iglesia es especialmente famosa porque alberga la reliquia de la Sacra Leche –presuntamente, leche materna de la virgen María que pudo haber tomado Jesucristo–, en una de las capillas más celebradas del escultor Andrea della Robbia. En esta capilla se encuentra el museo de Arte Sacro de Montevarchi. Además de la colegiata de San Lorenzo, resultan visitas aconsejables la iglesia de Santa María de la Azucena (santa Madonna del Giglio), datada en el siglo XVI; la iglesia de la Misericordia, que se convertiría después del siglo XVI en el monasterio de Santa María de la Leche (Santa Maria Del Latte), y el claustro Cennano, que formaba parte del convento de San Ludovico. Por otro lado, el monasterio de La Ginestra es otro interesante edificio que desempeñó las funciones de hospital para los peregrinos que acudían a Roma a lo largo de los siglos; aún conserva frescos medievales en bastante buen estado.
El Cassero servía de torre y cuartel. Foto de Wikimedia Commons.
La villa Galeffi le debe el nombre al pintor local Galeffi. WiCo.
La preciosa Villa Masini. Foto de Wikimedia Commons.
Cráneo de elephas meridionalis. Foto de Wikimedia Commons.
Especialmente recomendable es subir a la cercana colina de los capuchinos, que domina la ciudad pues, por ende, entrega al viajero las más ambiciosas vistas de la población y del valle. Entre la arquitectura civil es destacable el Palacio del Podestà, así como la configuración urbanística de una ciudad de calles rectas que aún desprende una atmósfera medieval entre los viajeros. La plaza central de la población, que se llama piazza Varchi, es el lugar más genuinamente toscano de la población, con sus pórticos y la torre del palacio del Podestà. También resultan interesantes las villas de Masini y Galeffi. También existen vestigios de la arquitectura militar que desarrolló la población en épocas pasadas y se conservan fragmentos de murallas y algunas de las puertas, además del Cassero, que es un antiguo acuartelamiento. En las proximidades de Montevarchi se encuentra el Pinetum de Moncioni, una especie de jardín botánico en el que se encuentra la colección de coníferas más grande del siglo XIX, con especies como secoyas, pinos, piceas, tejos… Como decía el alcalde de la región cuando hablaba de Monteverchi, se trata de una región en la que se conservan bastantes bosques y zonas salvajes, lo que añade atractivo a la localidad. En el Museo Paleontológico se pueden admirar numerosos restos, entre los que destaca el cráneo de un elephas o mammuthus meridionalis hallado en la región.
En las orillas de ese Éufrates que baña las agitadas tierras sirias se encuentran los restos de Dura Europos, una importante ciudad greco-macedónica que fue fundada hacia el 300 a.C. por Seleuco Nicátor. Seleuco –general de las huestes de Alejandro Magno– regentó uno de los gajos del imperio helenístico de Alejandro, el conocido como imperio seléucida, que era tan extenso que las redes de comunicación se convirtieron en un factor trascendental para su subsistencia. Con esta finalidad nació Dura Europos, que hacía de enlace con otras ciudades importantes, como las magníficas Edesa y Nísibis. Con la dominación romana, el enclave ganó en importancia militar durante la época de Trajano. Así lo demuestran los restos de instalaciones militares que albergaba la ciudad, ya que se encontraba en la confluencia entre la siempre conflictiva Partia, el reino de Palmira –sus ruinas son hoy Patrimonio de la Humanidad de la Unesco– y la limes romana. Los restos de la ciudad están en tan buen estado de conservación que algunos le han dado a Dura Europos el nombre de «Pompeya del Desierto». Su buen estado se debe en parte a que tras ser tomada se abandonó de forma que sus ruinas permanecieron de algún modo atrapadas en el tiempo.
Las zonas que constituían la frontera de la parte oriental del Imperio romano son especialmente interesantes porque en ellas han dejado su influjo los diversos periodos históricos, culturas y cultos que allí se desarrollaron. Parece que Dura Europos era una ciudad esencialmente cosmopolita y muy tolerante, característica que se deduce de los textos hallados en diferentes idiomas, desde el griego hasta el hebreo o el safaítico. Esta circunstancia contribuyó en gran medida a la existencia de templos de distintos cultos. Por ejemplo, existen restos de un mitreo, en el que se practicaba el mitraísmo, una extraña religión que había cundido especialmente entre la soldadesca de las legiones –dato que, por lado, sirve para confirmar la importancia militar de Dura Europos.
Nada como ver una panorámica desde el cielo para comprender el apelativo de «Pompeya del Desierto». En esta dirección se pueden ver los diferentes puntos de la ciudad y los elementos más importantes: http://en.wikipedia.org/wiki/File:Duraeuropusmap.jpg
La ciudad fue levantada íntegramente con el único material del que disponían los arquitectos en estas latitudes del Medio Oriente: el adobe. Todos los edificios que se conservan en ella se erigieron con él, pues la cercanía del Éufrates aseguraba su producción. Los templos, claro está, se construyeron también en adobe, sin distinción de cultos: además del mitreo, existen restos de otros lugares religiosos como la sinagoga de Dura Europos, que se encuentra junto al muro defensivo de la ciudad. Esta sinagoga conservaba distintos frescos de escenas bíblicas basadas en los libros del Antiguo Testamento. Junto a la sinagoga se encuentra la casa-iglesia de Dura Europos en la que se reunía una primitiva comunidad cristiana; esta casa-iglesia conserva diversos frescos que representan los milagros más famosos que obró Cristo, como el arrepentimiento del buen ladrón o la sanación del paralítico. Así mismo se trata de las primeras pinturas en las que aparece la imagen de Jesús. Esta casa era en realidad propiedad privada de un rico individuo de la ciudad, pues así lo demuestra el hecho de que en ella se hayan encontrado estructuras propias de las viviendas de la clase alta romana, como un atrio o un impluvium. Otra de las construcciones religiosas más impresionantes es el templo del sanguinario y cruel dios Baal, cuyo origen se puede buscar en la cultura fenicia y entre las diversas tribus semíticas que poblaron la región.
La sinagoga se construyó promediado el siglo III. Wikimedia Commons.
Fresco de la sinagoga de una escena de Esther. Foto de Wikimedia Commons
El templo de Baal. Foto de Wikimedia Commons.
Casa-iglesia de Dura Europos. Foto de Wikimedia Commons.
Respecto del muro, merece capítulo aparte. Es tan extenso que a lo largo de su perímetro están engarzadas hasta 26 torres defensivas que los arqueólogos utilizan para localizar los monumentos y edificios de la ciudad. Así, la casa-iglesia cristiana se encuentra junto a la torre 17; la sinagoga, entre las torres 18 y 19; y el mitreo, entre las torres 23 y 24. Por otro lado, aún se mantienen en pie varias puertas de la ciudad. La más destacada es la puerta Palmirana, que la principal entrada a Dura Europos. Muchos otros edificios y estructuras alberga esta milenaria población, pero, en cualquier caso, los placeres más elocuentes de ella consisten en cosas tan sencillas como caminar por sus callejuelas, sentirse transportado hasta la época de Alejandro Magno y dejarse llevar por el magnífico entorno junto al río Éufrates. Soldados británicos redescubrieron la Pompeya del Desierto allá por el año 1919.
El lector puede ahondar en la historia, las relaciones comerciales, la relevancia estratégica y los periodos culturales que vivió la población en esta monografía sobre Dura Europos elaborada por el catedrático José María Blázquez.
Aunque muchos se quejan de que ya está todo descubierto, de que nuestros abuelos no nos han dejado nada por descubrir ni por hollar primero, resulta innegable que, por insólitos, muchos rincones de la Tierra nos parecen como nuevos. Así sucede, por ejemplo, con el Bosque de Piedra de Shilin –en China–, o con el Parque Nacional de Timanfaya –en Lanzarote, Canarias. Igual de sorprendentes son los agujeros azules del Caribe, con la particularidad de que se encuentran bajo el océano y, por tanto, se convierten en lugares envidiables para aquellos aficionados al submarinismo o a la simple contemplación de la naturaleza acuática. Aunque se pueden contar más, las formaciones geológicas más importantes de este tipo son el Agujero Azul de Dean –Dean’s Blue Hole– y el Gran Agujero Azul –Great Blue Hole–. Ambos eran originalmente cuevas cuyo techo se derrumbó y que se fueron inundando conforme subió el nivel del mar en un proceso que se inició hace 153.000 años.
Ubicación del Dean's Blue Hole.
Ubicación del Great Blue Hole.
El Agujero Azul de Dean se encuentra junto a la localidad de Clarence Town, en Isla Larga (Long Island), en el archipiélago de Bahamas. Este orificio en la tierra es de origen kárstico y se hunde en el océano 202 metros. En este agujero, el buceador libre William Trubridge marcó el récord mundial de inmersión sin aletas, ya que se sumergió 84 metros.
El Agujero Azul de Dean. Fotografía de Wikimedia Commons.
Foto del apneísta William Trubridge. Tomada de Wikimedia Commons.
Porotro lado, el Gran Agujero Azul se encuentra en el Sistema de Reservas de la Barrera del Arrecife de Belice, que pertenece al Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1996. Este agujero, también de origen kárstico, se hunde 124 metros por debajo del nivel del mar y el famoso explorador e investigador Jacques Custeau lo definió en 1971 como uno de los mejores sitios del mundo para practicar submarinismo. En este agujero se pueden avistar tiburones nodriza, tiburones toro, tiburones cabeza de martillo, así como meros y otras especies mucho menos inquietantes.
El Great Blue Hole concita a toda clase de aventureros. http://urlcorta.ws/?i=5xk
Imagen del Great Blue Hole. Foto de Wikimedia.
Cabe añadir que cuando este tipo de configuraciones geológicas se encuentran en tierra firme se denominan en español «cenotes», voz de origen maya. Como bien recoge Wikipedia, «un cenote es una dolina inundada de origen kárstico que se encuentra en algunas cavernas profundas, como consecuencia de haberse derrumbado el techo de una o varias cuevas». Tanto el Dean’s Blue Hole como el Great Blue Hole se mantienen como lugares insólitos que animan a ser explorarados y que se hallan inmersos en la región de las Pequeñas Antillas, sobre las que el lector puede encontrar más información en la Guía de viajes Mundicolor.
Torrox resulta de la conjunción de varias bondades naturales: la proximidad del Mediterráneo, el abrigo del Parque Natural de las Sierras de Tejeda y Almijara –presidido por los 2.066 metros de altura del monte La Maroma– y un enclave envidiable en la comarca de Axarquía-Costa del Sol. Una combinación tan particular de factores no puede generar sino el mejor clima de Europa, que es la consigna publicitaria con la que se promociona el municipio malagueño –en términos meteorológicos se conoce como microclima subtropical de Torrox y la temperatura media anual es de 18,2º centígrados. Un municipio que, por cierto, se divide en dos localidades: Torrox, y Torrox-Costa, que goza de unas infraestructuras turísticas muy desarrolladas y que está habitado todo el año por una amplia colonia de alemanes –aunque también hay un gran número de británicos en la región. En la actualidad el municipio quiere conseguir que se empadronen 20.000 individuos, aunque en el padrón de 2008 la cifra ascendía a 16.395 habitantes.
La amplia plaza de la Constitución es uno de los rincones más apacibles. Foto de Wikipedia.
La localidad de Torrox conserva la arquitectura típica de los pueblos blancos andaluces. Foto de Wikipedia.
La playa de Torrox-Costa tiene algunos guijarros. Foto de Wikipedia.
Junto al faro se encuentran las ruinas de la antigua Caviclum. Foto de Wikipedia.
Origen histórico de Torrox: está en la colonia romana de Caviclum, dedicada a la exportación de de conservas y de la que existen distintos restos arqueológicos que yacen en Torrox-Costa, junto al faro –las termas romanas constituyen el conjunto menos deteriorado. Más adelante se asentaron allí los visigodos y luego los musulmanes, que hubieron de aplastar una importante rebelión de mozárabes descontentos con el califato. Los musulmanes fomentaron la plantación de moreras con el fin de desarrollar la producción de una seda que demandaban las importantes industrias sederas de Córdoba y de Granada y se reforzó decisivamente la economía de la región. Más adelante, los Reyes Católicos conquistaron la villa en 1488 y ya para 1503, Isabel la Católica condescendió a la construcción de una torre defensiva que permitiera repeler los reiterados ataques de piratas berberiscos. Otra nota histórica relevante tuvo lugar durante la invasión napoleónica, cuando las tropas francesas hubieron de volar el fuerte de la ciudad en el momento en que emprendieron la retirada.
Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación. Foto de Wikipedia.
La iglesia y ermita de San Roque. Foto de Wikipedia
Actualmente, la localidad vive principalmente del turismo, ya que tiene un fácil acceso desde el Aeropuerto Internacional de Málaga. La localidad de Torrox-Costa dispone de 9 km de playas, que poseen una calidad ambiental envidiable. De hecho, dos de ellas, que son la playa de El Morche y la playa de Ferrara, han logrado colgarse el importante distintivo de bandera azul. Además de estas, existen otras excelentes como la playa de Torcasol o la playa del Peñoncillo. Pero no son las playas los únicos lugares en los que se puede disfrutar de la naturaleza de la región, también existe la posiblidad «montaña» en el Parque Natural de las Sierras de Tejeda y Almijara, donde es especialmente interesante y extraño el Paraje Natural de los Acantilados de Maro-Cerro Gordo. Estos están compuestos por un conjunto de calas y acantilados que en algunos puntos tienen desniveles de unos 250 metros de altura y que es considerada Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo –ZEPIM. Por otro lado, también constituye una visita interesante el cono volcánico de Torrox, que tiene un enorme cráter. Así mismo, como parte de la Axarquía, Torrox está cerca de localidades como Nerja, Frigiliana o Torre del Mar, que ofrecen interesantes playas al viajero.
La playa de El Morche no está muy frecuentada en verano. Foto de http://www.hotel-alandalus.com
La playa de Ferrara se extiende por unos dos km de longitud. Foto de http://www.diariosur.es/
Vista de la sierra de Almijara. Foto de Wikipedia.
Impresionante vista de los acantilados de Maro-Cerro Gordo
Como no podía ser de otra manera, a una población tan antigua y que vivió diversas épocas de pujanza económica no podía faltarle patrimonio histórico-cultural. Además de las termas citadas más arriba, los restos de la presencia romana incluyen también una necrópolis, así como ciertos hornos que se usaban en el proceso de producción de conservas de pescado. De la presencia árabe se conservan diversos edificios, como algunas construcciones defensivas, y, en especial, la casa de la Inquisición. Respecto de la arquitectura religiosa cristiana destacan los templos de Nuestra Señora de la Encarnación, la iglesia y ermita de San Roque, el convento de Nuestra Señora de las Nieves. Del siglo XVIII son destacados los edificios de la Aduana, la Casa de la Moneda y el antiguo hospital, mientras que del siglo XIX quedan la antigua fábrica de azúcar y el palacio de la Joya –donde se alojó Alfonso XII en su visita a la región tras los terremotos de 1884 y 1885. A esta cantidad de edificios se suma el encanto propio de los pueblos blancos andaluces que conserva Torrox. En cuanto a la gastronomía, son típicos platos de la región la migas –hay incluso un Día de las Migas–, el potaje de hinojo, la ensalada arriera o los jureles a la plancha.
http://youtu.be/ucET5d1abmU
En el mes de agosto se celebrarán distintas festividades locales: el día 5 tendrá lugar la fiesta en honor a los santos patrones de Torrox María de las Nieves y San Roque; en la segunda semana se festeja la feria de El Morche y ya el día 26 se acomete la romería de San Roque. Por otro lado, durante todo el año se organizan diversas rutas turísticas que toman como hilo conductor los distintos periodos históricos que ha vivido la localidad, como la Ruta Morisca, la Ruta Romana, la Ruta de Almanzor, la Ruta de los Abderramanes, o la Ruta Histórica. Para los que quieran disfrutar de los paisajes de la zona, también se ha instituido la Ruta Panorámica. Para obtener más información sobre Torrox y Torrox-Costa, el lector puede visitar la Página del Patronato Municipal de Turismo de Torrox.
Entre los países menos conocidos y menos visitados del Globo Terráqueo se cuenta la ex república soviética de Uzbekistán. Precisamente por ello no tienen una gran difusión los tesoros urbanísticos y arquitectónicos que se reparten por todo el país, aunque muchos no carecen de mérito ni fama. De Uzbekistán se podrían citar Taskent, la capital, que se sitúa al este, Bujará, ubicada al sur, o la mítica Samarcanda, uno de los principales centros de comercio de la antigua ruta de la seda. Sin embargo, hoy nos vamos a centrar en otro de los tesoros del país, la ciudad de Jiva –también escrito Khiva o Xiva–, que se divide en dos zonas: la de la ciudad nueva –Dichan Kala–, a extramuros, y la de la ciudad antigua –Itchan Kala–. La ciudad antigua pertenece al Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1990, con la denominación uzbeka de «Itchan Kala».
La propia Unesco reconoce que no quedan demasiados edificios antiguos, pese a lo cual Jiva se mantiene como «un coherente y bien conservado ejemplo de la arquitectura islámica de Asia central». Al igual que Samarkanda, esta ciudad se encontraba en la Ruta de la Seda, aunque tenía menos importancia. Jiva era una especie de punto de no retorno para los comerciantes que debían proseguir camino atravesando el desierto hasta la siguiente ciudad. Con todo, los orígenes de Jiva se remontan hasta el siglo IV d.C., según la Unesco, cuando era la capital de la antigua región de Corasmia –Khwarezm, en inglés. Sea como sea, las huellas de los diversos imperios y pueblos que han hecho historia en ella han quedado patentes en su urbanismo y arquitectura: los árabes la conquistaron en 712, los mongoles en 1221, los uzbekos en 1512 y los rusos en 1873. Jiva también vivió un periodo de autogestión, cuando en 1643 se convirtió en la capital del Janato de Jiva.
Tramo de la Ruta de la Seda en Asia cental. Jiva estaba situada en uno de los brazos secundarios que confluían en Samarcanda, a más de 700 km de esta. Foto de Wikimedia Commons.
El esquema urbanístico de la ciudad vieja responde al criterio de la planta rectangular. Esta planta rectangular está delimitada por una muralla que alcanza los 10 metros de altura en algunos puntos y que tiene la nada despreciable cifra de 11 puertas. El conjunto patrimonial de la ciudad está constituido también por un conjunto de 50 monumentos históricos y 250 casas antiguas que todavía mantienen todo el sabor de la vieja arquitectura de la región. De hecho, para incluir Jiva en la lista de Patrimonio de la Humanidad, la Unesco se acogió al 4º criterio de selección: «Por ser un extraordinario ejemplo de un tipo de edificio, de un conjunto tecnológico o arquitectónico o de un paisaje que ilustre una etapa significativa de la historia del hombre». Por ejemplo, entre todo el patrimonio histórico que tiene la ciudad, el edificio más destacado y que mayor interés despierta entre los viajeros es la mezquita Djuma, cuya entrada tiene un total de 112 columnas.
Hipostilo de Djuma, que cuenta con 112 columnas. La mezquita fue erigida en s. X y reconstruida en el XVIII. Foto de twiga_swala – Flickr
La mezquita Djuma, con el minarete azul, inacabado, tras una de las 11 puertas de Jiva. Foto tomada de la página web de la Unesco.
Fragmento de la muralla de Jiva. Foto de Wikimedia Commons
La mezquita de Djuma desde los muros de la ciudad. Foto de fantoraygun – Flickr
Mientras que la mezquita y las murallas representan la estampa típica de la ciudad, en realidad hay que resaltar algunos lugares más. Por ejemplo, la antigua fortaleza de Kunya Ark fue convertida por el jan Alla-Ulli en un interesante palacio. Este gobernante tuvo una grandísima influencia en el urbanismo de la ciudad y también construyó el palacio de Tach-Kauli. Dos mausoleos destacan también entre las construcciones que aún permanecen en pie desde la Edad Media: el mausoleo de Pahlavan Mahmud y el mausoleo de Sayid All-Uddin. Además de estas construcciones, también hay que citar las madrazas –esto es, las escuelas coránicas donde se aprenden los entresijos del Corán–, y entre ellas señalamos la madraza de Mohamed-Amin-Khan o la madraza de Alla-Kuli, que data del siglo XIX. Por cierto, en el siglo XIX los rusos empezaron a ambicionar la región y, por supuesto, la importante ciudad de Jiva. El general ruso Konstantín Petróvich von Kaufman la tomó en 1873.
Cuadro de la toma de Jiva, de Vasily Vereshchagin. Tomado de Wikipedia.
A modo de anécdota, añadimos que se cree que fue en Jiva donde nació el matemático, astrónomo y geógrafo persa Al Juarismi –Abu Abdallah Muḥammad ibn Mūsā al-Jwārizmī–, de cuyo nombre proceden tres palabras españolas del ramo de las matemáticas: «álgebra», «guarismo» y «algoritmo». Como resulta evidente, el apellido guarda una estrecha similitud con Khwarezm, la región en la que se ubica Jiva. Esto a modo de anécdota, y, a modo de curiosidad, conviene tener presente que Itchan Kala fue el primero de los lugares de Uzbekistán que fue admitido en la lista de bienes Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta que se trata de una ciudad que parece sacada de la infinitesimal chistera de las 1.001 noches.
Antes de viajar a Uzbekistán lo mejor es tener toda información posible sobre seguridad y salud, ya que se trata de un país en el que existe una gran precariedad de medios. En la página del Ministerio de Asuntos Exteriores se puede encontrar más información.
Naupacto, o Naupactus –como dicen los ingleses–, o Nafpaktia –como lo dicen los griegos–, es una localidad de Grecia que se encuentra en la periferia de Etolia-Acarnania. No es una población pequeña, puesto que en ella habitan en torno a 10.000 personas y es la segunda por tamaño de la citada periferia, pero presenta un encanto especial que tiene mucho que ver con que haya conservado el sabor auténtico del Mediterráneo viejo.
La estratégica localización de Naupacto a la entrada del golfo de Corinto, antiguamente conocido como golfo de Lepanto, ha conferido a la localidad una relevancia histórica especial y la convirtió durante mucho tiempo en un importante astillero del que se sirvieron generaciones y generaciones de griegos, así como todos los dominadores foráneos que ha tenido en su historia. Ya en los mitos de Heracles se menciona que este semidiós construyó en Naupacto una flota para acometer la invasión del Peloponeso. Más adelante, por ejemplo, durante la Guerra del Peloponeso fue un puerto muy disputado entre atenienses y espartanos y escenario de la batalla de Naupacto. La localidad cayó en poder de Venecia en 1407, que desarrolló sus construcciones defensivas al máximo, de forma que la localidad resistió durante varios meses un duro asedio de 30.000 turcos. Pero el día que le dio más fama a la localidad fue el 7 de octubre de 1571, fecha en que se produjo la gran batalla naval de Lepanto entre la Santa Liga –compuesta por España, Venecia, los Estados Papales y Génova– y el Imperio Otomano.
Estatua de Cervantes en Naupacto. Foto de Wikimedia Commons.
Escena de la batalla de Lepanto. Foto de Wikimedia Commons.
Dirigidos por don Juan de Austria, la derrota que los cristianos infligieron a los otomanos fue aplastante, aunque no pudieron explotar el éxito militar. En la batalla de Lepanto participó el escritor Miguel de Cervantes, que sufrió una herida en el brazo izquierdo que le hizo perder cierta movilidad. Los habitantes de Naupacto han conmemorado tan insigne presencia erigiendo una estatua de Cervantes junto al puerto. El correr de los años devolvió Venecia el control de la ciudad durante 12 años, hasta 1699, en que volvió a formar parte del Imperio Otomano hasta 1829. La continuada presencia veneciana en el lugar dejó los impresionantes complejos defensivos de la localidad, que constituyen su principal activo turístico. Por ejemplo, el castillo, que se asienta sobre un enorme promontorio, tiene el mérito de ser el único en Europa con cinco zonas defensivas, tal y como indica la página oficial de Naupacto.
La fortaleza sobre el promontorio. Foto de Wikipedia
Una de las puertas del casillo. Foto de www.nafpaktos.gr
Pero lo que más encanto tiene en la ciudad es su puerto. Dos brazos de murallas parece que abrazan la especie de ensenada que conforman los muelles. Esos brazos de murallas terminan en unos baluartes y sobre uno de ellos se encuentra la estatua de un famoso atleta: Anemogiannis. Tras este cinturón de murallas se concentra una serie de bares y terrazas en las que se puede disfrutar de un agradable aperitivo bajo la suave brisa del mar Jónico.
Vista del puerto desde la fortaleza. Foto de Wikipedia
Fortificaciones del puerto de Naupacto. Foto de Wikipedia
Además, hay varias playas en los alrededores de Naupacto, como la de Psani o la de Hiliadou, que en parte es naturista. Como dato de interés, conviene saber que la localidad se encuentra a unos 25o km desde la capital de Grecia, Atenas, aunque se puede tomar la ruta del Peloponeso –recomendada por Google Maps–, que permite atravesar distintos lugares de alto interés histórico-cultural (Epidauro, Corinto, Patrás…) para, por último, cruzar por mar hasta el puerto de Naupacto.
Que las islas Canarias son un torrente incontenible de naturaleza no puede negarse. Tampoco puede negarse que a menudo esa naturaleza en cierto modo desarma al hombre y es capaz de influenciarlo hasta las últimas consecuencias. La tercera cosa que no puede negarse es que el valle de Agaete y el Parque Natural de Tamadaba son irrepetibles muestras de la absorbente naturaleza canaria así como de su impresionante y sorprendente configuración. Las dos localizaciones se hallan al noroeste de la isla de Gran Canaria y conforman su vertiente noroccidental, que desciende hasta el océano Atlántico. De hecho, la etimología guanche de «Tamadaba» (de «tama» > borde, orilla; y «adawa» > elevación, desnivel, pendiente) alude precisamente a esa caída que hace la tierra desde el monte Tamadaba –de 1.000 metros de altitud–, que da nombre al parque, hasta el gran océano.
Este parque natural destaca por su espectacular paisaje, formado de barrancos, zonas escarpadas, empinadas estribaciones, riscos, macizos y hasta acantilados sobre el océano. Las vistas de Tamabada son tan particulares que impresionan la sensibilidad del viajero hasta casi dejarle paralizado, con la sensación de no haber visto antes nada semejante. Si citamos accidentes geográficos concretos de este parque, los más renombrados son el mismo pico de Tamadaba, el barranco de la Hoya, barranco de la Hoya de Laurel, el risco Faneque –junto al océano–, el barranco de El Perchel o las numerosas e increíbles cascadas de agua que rodean el risco de Agaete. La configuración de este parque constituye una espléndida exhibición de lo que podríamos llamar el músculo de la naturaleza, de forma que no es extraño sentir una especie de síndrome de Stendhal ante su apabullante belleza. Además de los lugares descritos, en el Parque Natural de Tamabada se puede contemplar el hermoso fenómeno de las cascadas de nubes.
Cascada de nubes en Tamabada. Este fenómeno es frecuente en el parque. Foto de www.meteored.com.
Vista de la vertiente del parque de Tamadaba. Foto de www.rinconesdelatlantico.com.
Aunque hasta ahora nos hemos concentrado en la configuración geológica del parque, la diversidad vegetal y animal es muy apreciable. En cuanto al reino vegetal que puebla Tamadaba, son destacables los pinares húmedos de la vertiente norte, los pinares secos que dan a El Risco y Tirma, así como los tabaibales típicos de Canarias. Por lo que respecta a la fauna, destacamos exotismos como el lagarto gigante grancanario, que puede llegar a medir unos 80 cm de largo.
El lagarto gigante de Gran Canaria (gallotia stehlini) no está amenazado por el hombre. Foto de www.infojardin.com.
Desde 2005, el Dedo de Dios no tiene la prominencia superior. La tiraron los fuertes vientos. Foto de Wikimedia.
Conviene aclarar que este parque natural incluye el valle y el municipio de Agaete, y también las bellas localidades de Barrio de San Pedro, Vecindad de Enfrente, Casas del Camino, Berrazales y El Hornillo, las cuales conforman la espina dorsal de este precioso valle canario. No es recomendable renunciar a seguir una ruta que recorra todas estas localidades, pues a través de ellas se puede captar la verdadera alma del parque natural y de las gentes que lo habitan. Por ejemplo se pueden conocer los cultivos de naranjos y de frutas tropicales, así como las curiosas plantaciones de café. Por otro lado, uno de los principales reclamos turísticos, el Dedo de Dios –amputado por la intemperie en 2005–, se encuentra junto al Puerto de las Nieves, pedanía de Agaete, ya en la costa.
Los graneros de Bisbique. Foto de http://grantamaran.blogspot.com
Vista de Vecindad de Enfrente. Foto de www.canariaspanoramicas.com
Para ofrecer un retrato más completo de la región, resulta oportuno mencionar que la historia del valle es realmente rica. Se han hallado abundantes restos de la cultura guanche, por ejemplo la necrópolis prehispánica del Maipés –en Agaete–, los graneros y cuevas de Bisbique, o los yacimientos arqueológicos del valle de Guayedra. Se añade a esta presencia guanche el hecho de que en 1478 los castellanos emprendieron la conquista de Gran Canaria a través de este valle. De estos años quedan los restos de la casa fuerte de Agaete, que fue la base militar desde la que se dirigió y reorganizó la conquista de la isla a partir de 1481. Se puede ahondar algo más en la historia de esta casa en esta conferencia sobre su recuperación y conservación. En cualquier caso, la arquitectura popular de Agaete y los pueblos de los alrededores conservan todo el sabor tradicional, con las paredes blancas y los suaves colores marrón, azul y verde que adornan a los sobrios maderos de las puertas o las ventanas. También conservan algunas pequeñas iglesias antiguas y algún olvidado rincón de interesante valor patrimonial…
Se recomienda visitar estos preciosos lugares durante los meses de la primavera y el otoño. Encontrar alojamientos es fácil, pues con buscar en Goolge «valle de agaete», ya en la primera página aparecen resultados. Se puede encontrar más información sobre el valle y sobre el Parque Natural de Tamadaba en la página del Ayuntamiento de Agaete. También se puede consultar la página de la Mancomunidad de los Ayuntamientos del Norte de Gran Canaria.
A primera vista puede parecer que la palabra «osario» podría venir de «oso», que puede tener algo que ver con «hacer el oso», o que quizá un tal Sedlec crió fama de osado y se echó luego a dormir con el mote de «osario». Unas suposiciones nada más lejos de la realidad, porque, como algunos ya habrán advertido, «osario» procede de la voz latina «os»,«ossis», que significa «hueso». Por tanto, el osario es el «lugar donde se hallan huesos» y están pensados para recoger los restos óseos de antiguas tumbas cuando el espacio para nuevos enterramientos no resulta suficiente.
El osario de Sedlec –Kostnice Sedlec, como dicen los checos– alude una capilla subterránea de la iglesia de Todos los Santos que se encuentra en la ciudad checa de Kutná Hora. Tiene la peculiaridad de estar construida y decorada con miles de huesos humanos procedentes del antiguo cementerio aledaño. La verdad es que podría tratarse de un escenario de los cuentos de Poe. Esos restos debieron ser exhumados durante el siglo XV para satisfacer la creciente demanda de espacios para nuevos enterramientos que se produjo en la vieja Bohemia durante los siglos XIV y XV (por la aparición de la peste y por las guerras de los herejes husitas).
Exterior de la iglesia que alberga la capilla del osario. Foto tomada de Wikimedia Commons.
Altar de la capilla de Sedlec, con esqueletos rodeando la cruz. Foto de Wikimedia Commons.
Unas circunstancias peculiares contribuyeron al surgimiento de este tenebroso osario. Además de la creciente demanda de espacio que provocaban las catástrofes sanitarias y bélicas, existía en Sedlec una sobredemanda adicional de espacio para enterramientos porque un abad del lugar se había traído un puñado de tierra del Gólgota a su regreso de Tierra Santa y lo esparció por el camposanto otorgándole así un mayor grado de santidad y misticismo. Muchos hombres pudientes desearon ser enterrados en el cementerio del suburbio de Sedlec y muchos de las antiguos restos se exhumaron y se depositaron en la capilla de la iglesia de Todos los Santos.
Después de siglos de descuido, en 1870 se le encomendó al tallador de madera František Rint que ordenara todos los huesos. Él es el verdadero responsable de la actual disposición de los mismos que, por cierto, corresponden a unas 40.000 personas. Dice la propia página del sitio que «las creaciones más interesantes del maestro Rint son el candelabro del centro de la nave, que está hecho con todos los huesos del cuerpo humano, dos custodias junto al altar principal y el escudo de armas de la familia de nobles Schwarzenberg, a mano izquierda en la capilla». Cabe decir que existen más osarios de este tipo, como la capela dos Ossos, en Évora (en Portugal), la capilla de Sancti Spiritu o Silo de Carlomagno (en Roncesvalles), la cripta de la iglesia de Santa María de la Concepción de los Capuchinos (Roma), las catacumbas de París y de Nápoles, o la tumba de los diez osarios, en Jerusalén.
Cripta de Santa María de la Concepción de los Capuchinos. Foto tomada de Wikimedia Commons.
Capillas de santiago y de sancti spiritu, en Roncesvalles. Foto: http:// elespiritudelchemin.wordpress.com
Como dato que conviene tener en cuenta, en la ciudad de Kutná Hora existen además dos lugares que pertenecen al Patrimonio de la Humanidad de la Unesco: la iglesia de Santa Bárbara y la catedral de Nuestra Señora. Pero esto es materia de otro post. Se puede ahondar un poco más en la curiosidad del osario de Sedlec en la página oficial de kostnice: http://www.kostnice.cz/.
Uno de enero, dos de febrero, tres de marzo, cuatro de abril…
Cinco de mayo, seis de junio, siëte de julio: San Fermín…
No ha habido un pareado que mejor resuma las fiestas y el ambiente que les espera mañana a los pamploneses, cuando el trueno del chupinazo proclame el inicio de las Fiestas de San Fermín. Los sanfermines, como se las conoce popularmente, son una mezcla de carnestolendas, euforia, optimismo y considerables melopeas, unida a una amalgama de gentes de toda procedencia que durante nueve días toman el testigo de una tradición que se remonta al siglo XII. Cualquiera puede imaginar las consecuencias del cóctel.
El cohete del chupinazo –txupinazo– se lanza desde el precioso ayuntamiento de Pamplona a las 12 en punto del día 6. Ese mismo día a las 16:30 tiene lugar el Riau Riau, en el que las personas reunidas en la plaza Mayor acompañan hasta la capilla de San Fermín a la corporación municipal bailando y cantando el famoso vals de Miguel Astráin «La alegría por San Fermín». Nada mejor que un vídeo para ilustrar en qué consiste exactamente el Riau riau:
Entre los mayores atractivos de los sanfermines se encuentran las celebraciones taurinas. Todos los días a las 8 de la mañana se realizan los encierros tradicionales, que concluyen en la plaza de toros Monumental de Pamplona (inaugurada en 1922; a las 18:30 comienzan las corridas de toros en el citado coso taurino.
Siguiendo la profunda tradición taurina de Pamplona, cada noche se hace un peculiar encierro pensado para los más pequeños. El «Toro de Fuego» es una maqueta hecha de cartón que lleva adosados un puñado de cohetes y petardos; distintos mozos se la ponen encima y corren tras los apremios de la traviesa chiquillería.
Toro de Fuego. Fotografía de http://www.sanferminencierros.com
Pamplona se convierte durante los sanfermines en un lugar de diversión y excesos, con diversas opciones de marcha. Entre los lugares donde se concentra la exultante juventud se cuenta la zona de la calle Jarauta y sus alrededores –donde se concentra la mayoría de las peñas; la zona de Caldedería, San Nicolás, la plaza del Castillo y Estafeta –que tiene la fama de ser los lugares donde más extranjeros se concentran; la zona que ocupa los alrededores de la plaza de toros –Olite, Arrieta… Aprovechando el rumbo errante de la noche, el sanferminero puede tratar de buscar algunos de los lugares y construcciones más representativas de la ciudad, como por ejemplo:
La fachada del ayuntamiento de Pamplona, de estilo Rococó, es de 1755. Foto de FreeCat - Flickr
Julián Arteaga terminó de construir el parlamento de Navarra en 1892. Foto de Wikimedia Commons.
El baluarte de Redín pertenecen al sistema defensivo erigido en el siglo XVII. Foto de Wikimedia Commons.
La catedral de Santa María la Real alberga la capilla de San Fermín. Foto de Wikimedia Commons.
El palacio de Navarra se ubica en la plaza del Castillo. Es del siglo XIX. Foto de Wikimedia Commons.
La iglesia de San Nicolás data del siglo XII, aunque tiene añadidos del XIX. Foto de Wikimedia Commons.
Este año, San Fermín coincide con la celebración una desdichada circunstancia: este sábado se cumplió medio siglo de la muerte del premio Nobel de Literatura Ernest Hemingway, el mejor y mayor propagandista que jamás hayan tenido los sanfermines.
Programa de los sanfermines (2011)
Día 6 de julio:
Chupinazo: en la plaza del ayuntamiento (12:00 hs.)
Riau-riau: en la plaza del ayuntamiento (16:30 hs.)
Gigantes y cabezudos: sale desde la estación de autobuses (17:00 hs.)
Fuegos artificiales: parque de la Ciudadela (23:00 hs.)
Día 7 de julio:
Encierro (8:00 hs.)
Procesión de San Fermín: hasta la capilla de San Fermín (a las 10 hs.)
Primera corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs)
Toro de Fuego: plaza de Santiago (22:00 hs). Todos los días.
Fuegos artificiales: parque de la Ciudadela (23:00 hs.)
Día 8 de julio:
Primer encierro de San Fermín (8:00 hs.)
Herri kirol: campeonato de levantamiento de piedras (12:00 hs.)
Primera corrida de toros de San Fermín: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Conciertos (Mago de Oz y Rock Star): plaza de los Fueros (23:30 hs.)
Día 9 de julio:
Gigantes y cabezudos: estación de autobuses (9:00 hs.)
Encierro (8:00 hs.)
Corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Música de txistu y gaita: plaza del Castillo (21:00 hs.)
Macro-discomóvil: parque de Antoniutti (00:00 hs.)
Día 10 de julio:
Encierro (8:00 hs.)
Concurso de recortes: plaza de toros (11:00 hs.)
Corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Premio al guiri del año: hotel Europa (14:00 hs.)
Fuegos artificiales: parque de la Ciudadela (23:00 hs.)
Concierto (Los Suaves): plaza de los Fueros (23:30 hs.)
Día 11 de julio:
Encierro (8:00 hs.)
Desfile de Caballeros en Plaza: del consistorio a la plaza de toros (17:30 hs.)
Corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Concierto (Reincidentes): plaza de los Fueros (23:30 hs.)
Día 12 de julio:
Encierro (8:00 hs.)
Corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Conciertos: plaza de los Fueros (23:30 hs.)
Día 13 de julio:
Encierro (8:00 hs.)
Euskal Musica (bertsolaris) : parque de la Taconera (13:00 hs)
Corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Concierto (Eric Bell): plaza de los Fueros (23:30 hs.)
Día 14 de julio:
Encierro (8:00 hs.)
Corrida de toros: plaza Monumental de Pamplona (18:30 hs.)
Fuegos artificiales: parque de la Ciudadela (23:00 hs.)
«Pobre de mí»: toda la gente se reúne a las 12 de la noche en la plaza del ayuntamiento para cantar con pena el «pobre de mí, pobre de mí, que se han acabado las fiestas de San Fermín». Como en el vídeo.