
Oporto es la segunda ciudad más importante de Portugal, y rivaliza constantemente con la capital Lisboa. Como en el caso de otras ciudades europeas, su centro histórico fue proclamado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. En el caso de Oporto, se proclamó Patrimonio de la Humanidad por ofrecer un conjunto arquitectónico que ilustra una etapa importante en la historia, en 1996.
Oporto cuenta con una gran historia vinícola, ya que exportaba el vino desde el valle del Duero desde el siglo XIII. Sin embargo, no solo el vino es importante en esta ciudad, ya que varios platos típicamente portugueses tienen orígenes en esta ciudad. Por ejemplo, las llamadas «tripas à moda do Porto», o tripas a modo de Oporto, se originaron aquí, y aun hoy son el plato estrella de los mejores restaurantes.
El Palacio de la Bolsa, un edificio neoclásico que data desde la primera mitad del siglo XIX, es una de las mayores atracciones para los turistas, tanto por la belleza arquitectónica del palacio y por su importancia por ser la sede de la Asociación Comercial de Oporto. La Torre dos Clérigos, que fue construida entre los años 1732 y 1763, se considera uno de los símbolos más carismáticos de la ciudad ya que el campanario se puede ver desde distintos puntos de la ciudad.
El río Duero recorre la ciudad, y por ello hay numerosos puentes uniendo las dos orillas. Entre ellos cabe destacar el Ponte Maria Pia, que actualmente no se usa, el puente de Luiz I y el Ponte do Freixo. El antiguo Ponte das Barcas se derrumbó en 1809 cuando las tropas napoleónicas amenazaron a los habitantes de la ciudad con sus bayonetas, lo que llevó a miles de ciudadanos a intentar socorrerse en la otra orilla. El puente no aguanto el peso, y hoy no queda nada de su antiguo esplendor, salvo una placa conmemorativa.
Los museos Soares dos Reis o el Museo de Arte Contemporáneo de la fundación Serralves juntan las mejores obras a partir del siglo XVI. El Teatro Nacional de São João es uno de los más importantes del país, junto con el teatro Rivoli. La magnífica librería Lello se considera una de las mejores del mundo, según el periódico británico The Guardian.

Laplandia es una región de Finlandia, famosa en el mundo por ser la casa oficial de Santa Claus. El parque de ocio «El Pueblo de Santa Claus» atrae a millones de turistas, especialmente desde Europa, a este mágico lugar. El pueblo de Santa Claus se encuentra a tan solo 8 kilómetros de Rovaniemi, una de las ciudades más grandes de la región.
No solo el pueblo de Santa Claus atrae a tanta gente, si no que también la línea del círculo ártico pasa por este lugar. Al cruzar la linea 66º 32, uno puede encontrarse en el círculo ártico, más cerca del polo norte de lo que nunca se habría imaginado.
La oficina de Correos de Santa Claus es una atracción turística, no solo por sus numerosos souvenirs, si no por que también ofrece a todo aquel que quiera enviar sus postales de Navidad para las fiestas siguientes, con un sello especial de Santa Claus.
La oficina de Santa Claus le ofrece a los más pequeños y a los mayores una oportunidad para hablar con Santa Claus, aunque este no siempre esta en su oficina.
Para los mayores o para quien quiere aprovechar su estancia para hacer sus compras de Navidad existen varias tiendas, incluyendo marcas tan conocidas como Swarovski.
Los safaris Erasetti ofrecen a los que le interesa un tour por la zona alquilando motos de nieve. Uno puede disfrutar de la tranquilidad y la paz de esta región, normalmente cubierto de un manto blanco durante las fiestas de navidad, mientras se pierde por las montañas de nieve.
El Santamus es un restaurante decorado en el estilo tradicional de la región, con un atmósfera cálido y muy navideño. El restaurante ofrece joyas de la tradicional cocina de la región, todo producido con productos orgánicos de las granjas cercanas. Uno puede observar como los cocineros preparan la comida de cada uno, y el postre se sirve en un barco que aparece de una niebla azul, acompañado por el ululante sonido de las olas del mar. Este restaurante también ofrece otros servicios, entre ellos la posibilidad de buscar oro, tal y como se hacia años antes, o de disfrutar de la tradicional sauna.

Salt Lake City fue sede de los Juegos Olímpicos de Invierno del 2002. La capital del estado de Utah en EEUU es también una de las ciudades más grandes del país. Fundada en 1847 por los mormones, la ciudad se ha convertido en poco más de siglo y medio en una gran urbe, especialmente cuando en 1869, se construyó el primer ferrocarril transcontinental.
La presencia de los mormones en los orígenes de la ciudad significó que múltiples iglesias fuesen construidas durante el siglo XIX, y que aun siguen teniendo una importancia cultural y tradicional en la ciudad. Muchos museos también dedican sus exposiciones a motivos religiosos, como el Museo de Historia de la Iglesia. Múltiples museos, notablemente el de la Universidad de Utah, exponen muestras arqueológicas en el Museo Natural de dicha universidad.
Los teatros también tinen una gran presencia en la ciudad, dado que muchos cómicos y actores de Broadway vienen a Salt Lake City para participar en distintos espectáculos. La danza y el baile también están presentes en esta ciudad, representados por el Ballet West y por el departamento de danza moderna de la universidad de Utah. El Coro Mormón ofrece espectáculos cada semana, mientras la famosa Orquestra Simfónica de Utah, fundada en 1940, ofrece conciertos en la Abravanell Hall.
La música tiene una parte importante en el programa de ocio que ofrece la ciudad. Desde 2004, SLUG les da la oportunidad a distintos grupos de música de organizar conciertos y cada año hace un recopilatorio de canciones cantadas por numerosos grupos de distintos estilos musicales, desde el punk rock hasta el jazz.
El deporte de invierno juega un papel esencial para esta ciudad, especialmente desde los Juegos Olímpicos de Invierno. Los numerosos estadios construidos para la ocasión hoy albergan las competiciones nacionales e internacionales más importantes en varios deportes. Los nuevos monumentos arquitectónicos, como el Arca de Hoberman, se han convertido en los nuevos símbolos de la ciudad.

Talín se encuentra en la costa de Estonia, asomándose al Golfo de Finlandia. También conocida como Kolyvan y Reval, la capital de Estonia cobró importancia en el siglo XIII cuando se convirtió en una importante urbe debido a la ruta mercantil entre Rusia y los países Escandinavos.
La veleta que fue instalada encima del Ayuntamiento de Talín en 1530 se convirtió, a lo largo de los siglos, en el símbolo de la ciudad. Depicta al Viejo Tomás, un héroe y guardián de la ciudad. La veleta tuvo que ser renovada dos veces, la primera de ellas en 1944 al caerle una bomba durante los bombardeos de Marzo.
Talín es una ciudad que rebosa de museos, teatros y otras formas de entretenimiento. El Museo de Arte, el Museo al Aire Libre y el Teatro de Estonia son de los más importantes del país, éste último albergando la Ópera de Estonia y la Orquesta Nacional del país.
El Museo de Arte, conocido como el KUMU, tiene varias exposiciones, tanto fijas como temporales. La mayoría de su colección pertenece a la época después del siglo XVIII y al inconformismo de la era Soviética.
El zoo de Talín, abierto en 1939, tiene como símbolo un lince, quien fue el primer animal en este zoo. El Soldado de Bronce, una estatua de un soldado, simboliza la victoria sobre la Alemania Nazi, fue inaugurada en 1947, aunque fue trasladado en 2007 al cementerio militar de Talín.
La Raeapteek, la farmacia del ayuntamiento, es famosa por su larga historia. La farmacia lleva en el mismo lugar desde el siglo XV, y durante 325 años y 10 generaciones, desde antes de 1425, fue regentada por la misma familia, los Burchart. Aparte de vivir una gran parte de los acontecimientos de la ciudad, esta farmacia fue la primera en vender los nuevos productos como el tabaco cuando llegaron por primera vez a Europa, y fue la única que consiguió importar 400 litros de cognac francés por año.
La llamada Ciudad Inferior, la parte inferior de la ciudad, y Toompea, son dos distritos llenos de diversión y monumentos, ambos distintos pero dignos de visitar. Las numerosas torres de la ciudad, antiguas fortificaciones, y el majestuoso palacio Kadriorg son monumentos que uno debe ver y visitar si tiene la oportunidad.

Ciudad de Panamá es un sitio que atrae anualmente a muchos turistas. A la hora de decidir donde quedarse, muchos no saben que hacer, ya que hay cientos de hoteles donde elegir. Ciudad de Panamá es una ciudad grande, así que cada uno puede elegir si quiere quedarse cerca del centro de negocios o si prefiere estar en un lugar algo más alejado de la gran urbe para disfrutar del paisaje.
Los hoteles de Ciudad de Panamá suelen costar menos que en Europa, por lo que uno puede elegir entre varios hoteles de distintas categorías. Independientemente de la categoría, todos los hoteles suelen tener los servicios básicos, y las habitaciones son limpias y cómodas.
Hay diversos hoteles en Ciudad de Panamá. El Avalon Grand Panamá es uno de los más curiosos, ya que se encuentra a tan solo 20 minutos de la ciudad y está rodeado por 40 acres de selva. En su territorio se encuentra un parque acuático que abre una vez a la semana, y ofrece numerosos servicios, desde sauna hasta salas de reuniones, de los que todos podrán disfrutar.
El Riande Airport Hotel & Resort ofrece a sus clientes la posibilidad de practicar el turismo ecológico. Situado a menos de veinte minutos del centro, se encuentra en un lugar más apartado, lo que permite que sus clientes disfruten de las vistas a la naturaleza o puedan ir de caza. Este lugar es muy famoso entre los llamados «birdwatchers», u observadores de pájaros, quienes suelen frecuentar este lugar.
El Riande Granada Casino & Hotel y el Riande Continental & Casino también son de los más famosos, ya que sus espaciosas habitaciones en el centro de la ciudad le ofrecen la oportunidad de bajar al casino del hotel o de disfrutar y relajarse en sus enormes piscina.

Tampere es una ciudad en Finlandia, situada entre dos lagos. Ambos lagos, el Nasijarvi y Pyhajarvi, generan fuertes rápidos que fueron importantes para generar electricidad a principios del siglo XX.
La ciudad se conoce como el Manchester de Finlandia por su amplia oferta cultural y por su pasado como ciudad industrial.
En esta ciudad vivieron numerosos poetas, como Vaino Linna o Hannu Salama, a quienes les inspiró esta pintoresca ciudad. La oferta cultural en esta ciudad es amplia, debido a los numerosos teatros que hay en ella. El teatro de Tampere es uno de los más famosos del país, mientras que el teatro Pyynikin Kesateatteri fue uno de lo primeros teatros al aire libre de Europa. El Museo de Arte de Tampere alberga múltiples exposiciones de artistas de todo el mundo, notablemente del americano Richard Humann.
El Tammerfest, el célebre festival de rock urbano, tiene lugar cada Julio en esta ciudad, y atrae a jóvenes de toda Finlandia. El Festival de Jazz se celebra en Noviembre. El Festival de Cine de Tampere presenta todos los años cortometrajes de todo el mundo, y se celebra en Marzo.

Kioto es una ciudad de Japón. Antiguamente fue la capital del país, hasta que los poderes administrativos fueron transferidos a Tokio («la capital del Este») en el siglo XIX. La ciudad conserva muchos de los edificios construidos antes de la Segunda Guerra Mundial, ya que esta fue de las pocas ciudades que casi no se bombardearon durante las guerra. Aunque esta fue una de las ciudades potenciales para recibir el impacto de las primeras bombas atómicas, se salvó y hoy conserva sus estructuras antiguas.
Numerosos templos se imponen en esta ciudad. El antiguo palacio imperial, el Palacio Imperial Sento, construido a principios del siglo XVII, era el antiguo retiro para los emperadores. El Palacio en sí fue destruido en un fuego en 1854, y nunca se volvió a reconstruir. Sin embargo, hoy en día el territorio es uno de los jardines más grandes del país, con una belleza única. Los jardines se encuentran en la parte sur del Palacio Imperial de Kioto.
En la ciudad hay más de 2000 templos budistas y numerosas jinjas. Uno de los más célebres es el templo Otowa-San Kiyimizu-dera, construido sobre una cuesta. Lo más peculiar de este templo es que se construyó sin ni un solo clavo. Dentro del territorio que alberga el templo y las demás estructuras hay varias cataratas, y se considera buena suerte recoger agua de dos de las tres fuentes. También cabe mencionar los templos del Pabellón Dorado y Pabellón de Plata, dos lujosos templos.
Cerca de la ciudad se encuentra Arashiyama, donde está un parque natural de monos y un lago de impresionante belleza. Los visitantes pueden subir al monte y ver a los monos en su hábitat natural, e incluso está permitido darles de comer.
Los templos de Kamigamo y Shimogamo, sin duda las más famosas del mundo, fueron construidas alrededor de los siglos VII y VI, respectivamente. Estos templos cobran especial importancia en Mayo, cuando las procesiones recorren la distancia entre los dos templos. Estos templos son dos de los diecisiete monumentos históricos de la antigua Kioto, declarados Patrimonio de la Humanidad en 1994.
Kioto tiene múltiples museos, entre los cuales cabe destacar el museo Internacional de Manga y el Museo de Paz Mundial. La oferta cultural en Kyoto se ve afectada por sus tradiciones, tales como los festivales Gion Matsuri o el Bon Festival. Los festivales más importantes, como el Gion Matsuri que tiene lugar en julio, se celebran durante varios días, y culminan en una gran fiesta y fuegos artificiales.

La capital de Croacia es el corazón cultural, económico y científico del país. El río Sava une la ciudad con otras dos capitales europeas, Liubliana y Belgrado.
En el centro de la ciudad está la plaza de Ban Jelacić, una plaza construida en el siglo XVII. Alrededor de la plaza se encuentran edificios de varios estilos arquitectónicos, desde el clasicismo hasta el modernismo. En el centro de la plaza se encuentra una estatua a Josip Jelacić que fue originalmente instalada por los austriacos en el siglo XIX para conmemorar su batalla contra Hungría en la Revolución Húngara.
En cuanto a museos, Zagreb es una ciudad llena de diferentes exposiciones y colecciones de arte durante todo el año. El Museo Arqueológico de Zagreb es destacado por su colección egipcia, además de albergar la inscripción etrusca más antigua del mundo. El Museo de Historia Natural muestra a los visitantes los restos de neandertales encontrados en la zona. En Zagreb hay numerosos museos, especialmente en el centro histórico, desde aquellas con exposiciones de distintas civilizaciones antiguas hasta los museos de arte moderno o contemporáneo, como el Museo de Arte Naïve de Croacia.
Los teatros también tienen una importante presencia en el día a día de Zagreb, como el Teatro Nacional, abierto en 1895, o la sala de conciertos de Vatroslav Lisinski. Los festivales de múscia avant-garde se celebran cada dos años, al igual que los de películas animadas. El funicular de Zagreb también es una atracción turística que permite ver toda la ciudad desde las alturas.

La capital de Bulgaria se considera una de las ciudades más antiguas de Europa, con más de 7000 años de edad. Los siglos de historia siguen vivos en esta ciudad. Antiguamente, fue gobernada por Alejandro Magno, y siglos más tarde fue una de las primeras ciudades romanas al ser el Cristianismo reconocido como religión oficial. Durante siglos pasados, la ciudad era conocida por sus baños termales, y aun hoy en día quedan restos de lo antes era el anfiteatro de la ciudad. La ciudad fue destruida por los Hunos en 447, pero Justinio la volvió a reconstruir poco después.
Durante la Edad Media, la ciudad fue cobrando importancia. Fue parte del primer Imperio Búlgaro, por lo que la ciudad alberga hoy en día maravillas arquitectónicas de la época. Un claro ejemplo de esto es la Iglesia Boyana. La ciudad también fue, durante poco tiempo, parte del imperio Bizantino, antes de volver a formar parte del Imperio Búlgaro. La Iglesia de Santa Sofía, una de las más famosas del mundo, es un recuerdo de esos tiempos, cuando la ciudad era un importante núcleo mercantil del Imperio. La Catedral de Alexander Nevsky también se ha convertido en el símbolo de la ciudad.
Varias fuentes termales y minerales se esconden en la gran ciudad, aunque proporcionan vistas espectaculares, al igual que el monte Vitosha.
Hoy en día, Sofía es una ciudad moderna, con numerosos mehani, bares tradicionales, llenos de gente todos los días de la semana.
Otro lugar de interes es la biblioteca nacional, fundada en el siglo XIX, que alberga escrituras antiguas que conmemoran la historia de esta ciudad. El Museo Arqueológico, situado en una antigua mezquita de los tiempos del Imperio Otomano esconde tesoros de los Balcanes, dignos de ver.

Christchurch es las ciudad más grande de la isla Sur de Nueva Zelanda. Se considera que la ciudad es la puerta a la Antártida, debido a su posición geográfica. Las primeras expediciones hacia este continente partieron de esta ciudad, algo que conmemora la estatua del explorador Robert Falcon Scott.
La ciudad, a pesar de su pequeño tamaño, ofrece ocio y turismo cultural a sus visitantes. El famoso y espectacular parque Hagley, de 30 hectáreas, no solo ofrece la posibilidad de pasear al aire libre, si no que también es un sitio para practicar diversos deportes, desde el cricquet hasta el golf. El parque también se utiliza para conciertos de grupos locales y para festivales.
Los jardines botánicos de Christchurch albergan varias plantas y demás representantes de la flora local.Abierto desde 1863, los jardines están construidos sobre el río Avon. En el Rose Garden se encuentran más de 250 tipos de rosas, mientras que en otras partes de los jardines botánicos se pueden encontrar numerosos híbridos herbales, y en el Rock Garden, viven numerosas plantas que estań en flor a lo largo de todo el año.
La ciudad se encuentra cerca de un puerto marítimo, hecho que al pasar los años la convirtieron en una de las ciudades más importantes del país. La Catédral de Christchurch, una de las más espectaculares, también es digna de visitar, al igual que el centro histórico de la ciudad. La cultura de esta ciudad es una mezcla de las tradiciones de los colonizadores del Imperio Británico y de la cultura aborígena de los Maorí.